La cirugía solo se recomienda en los pacientes con enfermedad hemorroidal sintomática que no dio resultado el tratamiento conservador y que presentan la siguiente sintomatología sangrado durante la evacuación continuo, protrusión de tejido al evacuar, prurito perianal, dolor perineal y Sensación de cuerpo extraño.
La cirugía se recomienda generalmente en pacientes con hemorroides de tercer y cuarto grado, Sobre todo en aquellos pacientes con trombosis, ulceración, componente externo, papila hipertrófica. Y en aquellos casos complicados con otras patologías como fisura anal, fistula, papilas hipertróficas o pliegues cutáneos extensos.
El objetivo del tratamiento quirúrgico son: eliminar tejido anormal, con las mínimas cicatrices posibles en el canal anal, no interferir con los esfínteres anales y mantener un orificio anal adecuado.
La cirugía para las hemorroides (hemorroidectomía) remueve las hemorroides. Es el estándar de oro y el método más completo para solucionar hemorroides internas y externas.
Una hemorroidectomía remueve el tejido excesivo que casusa el sangrado y la protrusión. Este se realiza bajo anestesia regional y dependiendo de las circunstancias requeridas del paciente puede realizarse en forma ambulatoria.
Una técnica de vanguardia es la THD (Transanal Hemorrhoidal Dearterialization) la cual reduce el hiperflujo arterial a las hemorroides y corrige el posible prolapso, reposicionando la mucosa en su sede natural. La operación con el método THD es mínimamente invasiva, porque no implica la extirpación de tejidos, y es absolutamente segura.
THD revoluciona el tratamiento quirúrgico de la patología hemorroidaria, garantizando la máxima eficacia del resultado y reduciendo al mínimo los niveles de invasividad, dolor y estrés para el paciente.
En CIRUGÍA COLORECTAL podemos proporcionarle mayor información de este tipo de operaciones y ayudarlo a seleccionar la apropiada para usted